1. Carisma Fundacional Este Carisma que comenzó a danzar en un Buenos Aires del 30. Una ciudad portuaria, con su ritmo propio, que se abría paso en una Argentina que tenía muchas promesas. Una ciudad que recibía inmigrantes y acogía centenares de realidades complejas, como toda ciudad cosmopolita.
A nivel de lo eclesial estaban las grandes parroquias y aquellas periféricas, con mucha población y necesidades apremiantes, que significaba exigencia para un solo sacerdote al frente.
Aquí vemos la Parroquia de Sagrada Familia, en el Barrio de Saavedra, un tanto marginal en la época en que el Padre Carboni fue párroco. Allí nos soñó. Un lugar inundable, con ciertas carencias.
San Lorenzo, en Almagro, y Santa Rosa en el Spinetto, lugares emblemáticos donde fue danzando este carisma; haciéndolo a un ritmo de ciudad, de ciudad creciente, acompañando los barrios, los conventillos, moviéndose de una parroquia a otra.
2. Carisma Pcia. de Buenos Aires Y comenzó otra danza, la del gran desafío de salir de la Capital. Mirar la provincia, con sus ritmos más lentos, más acompasados con la naturaleza, con sus siestas, sus estaciones de trenes, y sus almacenes. Y sobre todo la gente, receptiva y activa a lo que se propusiera.
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ResponderEliminar1. Carisma Fundacional
ResponderEliminarEste Carisma que comenzó a danzar en un Buenos Aires del 30. Una ciudad portuaria, con su ritmo propio, que se abría paso en una Argentina que tenía muchas promesas.
Una ciudad que recibía inmigrantes y acogía centenares de realidades complejas, como toda ciudad cosmopolita.
A nivel de lo eclesial estaban las grandes parroquias y aquellas periféricas, con mucha población y necesidades apremiantes, que significaba exigencia para un solo sacerdote al frente.
Aquí vemos la Parroquia de Sagrada Familia, en el Barrio de Saavedra, un tanto marginal en la época en que el Padre Carboni fue párroco. Allí nos soñó. Un lugar inundable, con ciertas carencias.
San Lorenzo, en Almagro, y Santa Rosa en el Spinetto, lugares emblemáticos donde fue danzando este carisma; haciéndolo a un ritmo de ciudad, de ciudad creciente, acompañando los barrios, los conventillos, moviéndose de una parroquia a otra.
2. Carisma Pcia. de Buenos Aires
Y comenzó otra danza, la del gran desafío de salir de la Capital. Mirar la provincia, con sus ritmos más lentos, más acompasados con la naturaleza, con sus siestas, sus estaciones de trenes, y sus almacenes. Y sobre todo la gente, receptiva y activa a lo que se propusiera.